lunes, 24 de mayo de 2010

VOLANDO, VOLANDO, SIEMPRE ARRIBA.

El mundo está enfermo.

Esto no es algo nuevo. Ya es cosa de hace bastantes años que nosotros mismos notamos las variaciones climáticas. La escasez de educación ambiental ha llevado a que las personas no sepan cómo no contaminar; no se aprecian las zonas verdes y se cuidan de mala manera.

Cualquier ayuda para el medio ambiente es bien recibida y la tecnología también contribuye a subsanar el planeta.

El cielo sobre nuestras cabezas se vuelve cada vez más ecológico. La industria de la aviación constantemente está mejorando sus medios de transporte aéreos. Y es que se han diseñado aviones extremadamente ecológicos, ya que consumen un 70 % menos de combustible que los actuales. Es verdad que también son un 10% más lentos pero... ¿Qué importa eso cuando estamos contribuyendo a que el mundo mejore?





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